EL CORTOPLACISMO

Considerando que ningún estamento, persona ni institución puede ser nuestro dueño o situarse por encima de nuestras aspiraciones, y mucho menos del esfuerzo o del sacrificio que histórica y culturalmente han sido valorados como bienes en sí mismos en detrimento de los resultados a corto plazo y de acontecimientos que caprichosamente alteran nuestro devenir.

Observando que entre nosotros y nosotras existen prototipos incontestablemente más avanzados en cuanto al enfrentamiento vital con las tendencias culturales y antropológicas que se han ido interiorizando en los seres que somos enraizados en visiones absolutamente dependientes de planteamientos anclados en los tiempos.

Valorando los esfuerzos que hasta la fecha han hecho otras vanguardias y otras personas en pro de la búsqueda de respuestas inmediatas a los cuestionamientos más vitales y metafísicos; y los descomunales esfuerzos por aglutinar bajo una única cúpula esa energía de entendimiento y causa.

Manifestamos que:

 1-    El tiempo no puede esperar

2-    La inmediatez es una actitud a reivindicar y a rescatar de su imagen denigrada en sectores de avanzada

3-    Estamos abiertos a recibir aportes puntuales de otras pretendidas vanguardias, pero siempre en nuestro beneficio, que en definitiva es el beneficio común de la causa a la que aspiramos

4-    Animamos a aquellos compañeros y compañeras que estén infectados por el virus de la reflexión retardante a que despierten a la realidad del ahora y desarrollen la acción directa con el indudable objetivo de evitar semanas, meses y años de mayor esperas frente a las computadoras.

5-    Rechazamos todo tipo de presión y estamos dispuestos a presionar en esa dirección.

6-    Deploramos la página en blanco con la excusa falsa de facilitar la imaginación de lector.

7-    Destacamos la importancia, pocas veces considerada de las sílabas. Para lecturas más ágiles, defendemos que cada sílaba tenga su propio espacio. Su propia página.

8-    Nos declaramos “cortoplacistas” como forma vital de vida y nos negamos a entrar en disquisiciones que nos hagan perder el tiempo

9-    Mañana es ya ayer

 

Claudia termina de leer. Se queda unos segundos pensando pero un grito la saca de sus reflexiones. Efraín está fuera de sí. Eres una puta vieja amargada siempre te opones a todo por principio. Antes de que la vieja Elena le responda Iñaki se adelanta. Hombre, Efraín, creo que te estás pasando. Deberías mirarte ese genio y esa tozudez, no es buena para el grupo. ¿Para el grupo? Dice Chema, el grupo debería responder a esos prepotentes pelotudistas con una pedorreta organizada. Yo creo que son unos desviacionistas del elemento central. ¿qué es cual? Pregunta irónica Elena. La madre que le parió a Iñaki, grita Efraín fuera de sí, ese es el elemento central. Claudia levanta el brazo, pues a mí ya me gusta lo que dicen los cortoplacistas. Elena la mira y le llama traidora. Todos asienten. Iñaki duda.

El teniente Pascual apura su tercer o cuarto brandi en la cafetería Nebrasca. Pregunta por Sebastián. No señor, le dice uno de los camareros. Aún no ha venido. Y mirando el reloj añade, y hace ya un par de horas que tenía que estar aquí. La odontóloga Beatriz abraza con pasión el sudor de su paciente. En la calle la vida duerme. Debido a disensiones internas y a que no se ponen de acuerdo en el nombre esta noche la vanguardia tampoco escribirá su manifiesto unitario.